lunes, 22 de febrero de 2010

El futuro será de la inteligencia artificial

Cinco innovaciones para los próximos cinco o diez años presentó IBM. Con la tecnología adecuada se puede mejorar la calidad de vida de las urbes y hacer de ellas ciudades inteligentes que cuiden el medio ambiente e incluso respondan a ciertas necesidades como si fueran organismos vivos.


La población de las llamadas “ciudades inteligentes” cada vez sigue creciendo y con ello se suman los conflictos sociales que las caracterizan: salud, transporte y el uso del agua entre otras. IBM puso bajo la lupa estas temáticas y ha comenzado a desarrollar soluciones viables, que no tendrían repercusión en el medio ambiente, utilizando los diferentes soportes que se desprenden de las energías renovables y la tecnología.




La compañía investigó y observó. Y después de varios años de estudios tomó algunas decisiones respecto de las áreas que necesitan de un cambio. La pregunta fue: ¿cuáles son las necesidades reales que tienen las ciudades? La respuesta, cinco innovaciones que pueden cambiar la vida de las personas en los próximos cinco o diez años.



IBM, dentro del área salud, pretende desarrollar una plataforma única del sistema de salud pública a través de redes interconectadas que puedan obtener acceso a la información de cada paciente. “Por ejemplo si un paciente se hizo algún examen en un determinado lugar, esa información debiera estar disponible en línea para cualquier especialista que vea a esa misma persona independiente de lugar donde se haya atendido”, explicó Claudio Vergara, chief technology officer de IBM para Chile y el Cono Sur.



Además, los propios funcionarios de la salud podrán conocer con precisión cómo, dónde y cuándo se desarrolla y extiende una enfermedad determinada, detectando y preparándose así para enfrentar una posible epidemia, como ocurre con la influenza humana AH1N1. “La internet de salud” viene a ser entonces también un plan preventivo.



COMBUSTIBLES



Otro eje temático importante en las urbes es el uso del combustible. Los automóviles y buses que recorren una ciudad no dependerán de los combustibles fósiles, responsables de la contaminación. Para esto, expertos trabajan diseñando nuevas baterías para vehículos eléctricos y con sólo una carga viajen de 300 a 500 millas, en comparación a las 50 ó 100 millas que hoy recorre un auto. Utilizando energías renovables, los automóviles podrían cargarse en sectores públicos gracias al suministro eléctrico de las ciudades, mediante la energía eólica y así disminuir las emisiones de gases.



El agua y su utilización también es un punto central de la propuesta. Actualmente este recurso es utilizado y distribuido en forma inadecuada, por lo tanto, IBM aspira a instalar un sistema de agua que disminuya hasta en un 50% el derroche por fugas en cañerías, más un sistema de purificación de agua que permita reciclarla y ser reutilizada. Por otra lado, los edificios, proyecta IBM, actuarían como un ente con vida ya que contarán con un sistema preventivo que localizará la temperatura sectorizamente, respondiendo rápidamente además a las necesidades del habitante.



La última propuesta es que la mismas ciudades prevengan crímenes, desastres o inundaciones, por ejemplo, a través de la asociación de los servicios públicos para que éstos actúen rápidamente en caso de una llamada de emergencia y así fortalecer “un control inteligente” en las urbes.



IBM aspira a concreta este proyecto en el país y para ello ya está colaborando en diferentes países del hemisferio norte como Estados Unidos, Italia, Alemania y Japón entre otros, fortaleciendo en estas ciudades la seguridad, la educación, el transporte, las energías renovables y la salud.